EL FRUTO DE LA VIDA

La geometría sagrada del fruto de la vida es una representación de un mapa para la creación de la vida. Está formado por 13 círculos o vasijas de energía-consciencia que reflejan diferentes sistemas informativos que explican diversos aspectos de la realidad que conforma la vida.

El Fruto de la vida contiene la base para el diseño de cada átomo y de cualquier forma de vida. Es la información que luego se va a materializar.

La vésica piscis es la esencia, la semilla de la vida con sus siete círculos marca un ciclo de tiempo, la fruta de la vida le otorga la estructura de la forma y la flor de la vida le insufla la información del tiempo y el espacio para la materialización.

La función del fruto de la vida consiste en crear los detalles de la existencia para que la vida se mantenga en movimiento y armonía.

Estos 13 círculos del Fruto de la vida son la expresión femenina de la energía, los cuales generan la manifestación de la energía masculina al trazar líneas rectas desde los puntos medios de los círculos, obteniendo así, la figura del cubo de Metatrón.

El Cubo de Metatrón empieza con un círculo central rodeado de otros 6 círculo formando la semilla de la vida, y cuando se unen otros 6 círculos, llegan a sumar un total de 13 círculos conectados por líneas rectas, aportándonos la unificación de las fuerzas masculinas y femeninas que conforman este universo. El cubo de Metatrón contiene en su interior los 5 sólidos platónicos: el tetraedro, el cubo, el octaedro, el icosaedro y el dodecaedro que representan el fuego, la tierra, el aire, el agua y el éter, y son considerados las formas tridimensionales básicas que constituyen los elementos de los cuales está formado el universo.

Los 13 círculos están dispuestos en 3 líneas de 5 círculos cada uno donde el círculo central es común a las 3 líneas, representando las direcciones de arriba y abajo, izquierda y derecha, adelante y atrás. En cada vuelta de círculos accedemos a diferentes niveles de expresión de la consciencia.

El fruto de la vida es un armonizador, un equilibrador que estabiliza los circuitos corporales a través de la energía del amor, y aporta la serenidad necesaria para centrarnos en lo que en cada momento estamos haciendo.

Encierra el secreto de la música, pues la distancia entre dos esferas es la misma que tienen los tonos y los medio tonos de los sonidos armónicos. La información de la estrella tetraédrica, la luz, el sonido y las armónicas de la música, provienen de este sistema de información, pues la luz, el sonido y las armonías de la música, están interrelacionados por medio de un campo en forma de estrella tetraédrica inscrito dentro de la geometría del fruto de la vida.

El fruto de la vida es la cristalización de la vida de un planeta conteniendo un registro completo de toda la vida que alguna vez vivió y murió en el planeta.

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