Puntos más importantes del eneatipo 7 a observar:
-Vigila tus tendencias más habituales:
-Te disipas e intentas escapar de la ansiedad
-Te vuelves aditiv@
-Impulsiv@, susceptible y a veces con reacciones infantiles para que te hagan caso
-Te gusta la actividad y a veces te vuelves compulsiv@, con periodos de euforia y descontrol y otros de tristeza y melancolía.
-Buscas románticamente lo peculiar, la aventura, la sorpresa y la variedad. No te pierdas yendo a por lo extraordinario o lo utópico. Disfruta de los detalles
-Observa tu tendencia a improvisar cuando te metes en temas que no controlas; tus ganas de fantasear, tu tendencia a acentuar lo positivo y desviar así tus sentimientos
Buscas en tu interior, pero no sabes realmente lo que deseas. Hay muchas cosas que te atraen y tiendes a probar todo lo que puedes, aunque en el fondo, sigues insatisfech@
-A veces confundes la imaginación con la realidad, el placer sexual con el amor, los proyectos con los logros y las potencialidades con las racionalizaciones
-Observa tu falta de compromiso y disciplina y date cuenta de cómo crean tu inestabilidad
-Date cuenta que tu permisividad y tu autoindulgencia suelen ser para evitar la frustración y el dolor
-Observa tu impaciencia y tu exigencia, pues ellos aceleran tu impulsividad y tu ansiedad
-Vigila tu tendencia a pensar, generar ideas y tener cada vez más cosas para hacer y en las que pensar. Date cuenta que sueles perder de vista las prioridades y caer en una actividad incesante
-Observa tu tendencia a ser el centro de atención, ya sea estimulando o inyectando energía en una situación, induciendo a la gente a hacer travesuras o conspirando contra algo
-La búsqueda de gratificación puede adquirir la característica de adicción: necesitas dosis cada vez mayores de aquello que te ha gustado para continuar en un estado de estimulación y euforia
-Observa tu tendencia a excederte en tus gratificaciones físicas. Tu tendencia a comer, beber, hablar… para llenar el vacío interior con cosas y experiencias
-Cuando te sientes frustrad@, expresas tu enfado y sueles exigir lo que deseas. Observa la creencia de la infancia: “si armo un berrinche, vendrán a atenderme”
-Crees que siempre has de cuidar de ti mism@. Esto en el plano emocional inconsciente responde a una sensación interna de no haber sido cuidado en la infancia como tú hubieras necesitado
-Si los demás no siguen tu ritmo o tus ideas, sueles sentirte rechazad@ o abandonad@. Esto te frustra y te enfurece, y te debates entre el deseo de cumplir tu compromiso y el de marcharte a hacer otras cosas
-Tiendes a disipar energía y recursos en relaciones y compromisos que no te llenan del todo y a veces, te sientes atrapad@ e insatisfech@
-Cuando te sientes dolid@, sueles lanzar ataques que hieren y desconciertan a los demás como defensa para rechazar el sentimiento de culpa y no pensar en tu parte
-Cuando la rabia y el resentimiento afloran, sueles desahogar tu frustración reprendiendo, criticando o haciendo comentarios sarcásticos. Te cuesta reconocer el dolor que causas, pues en tu enfado, te vuelves verbalmente ofensiv@, exigente y a veces agresiv@
-Cuando entras en conflicto con alguien, te cuesta hablar de tus sentimientos respecto a lo que todavía queda sin resolver
-Pensar se convierte en anticiparte y no sueles dedicar el tiempo suficiente para experimentar las cosas a fondo o para obtener una verdadera satisfacción
-El problema no es que no hagas caso de tus sentimientos negativos, sino que no los procesas completamente. Más o menos los adviertes y entonces, deseas pasar a otra cosa
-En los momentos de ansiedad, mantienes tu mente ocupada con proyectos e ideas para el futuro y excluyes de tu conciencia los sentimientos negativos
-Tu sentido de identidad suele depender de sentirte estimulad@. Esto te lleva a ponerte pocos frenos. Te molestan los límites, la autoridad o las limitaciones de todo tipo. Prefieres la libertad para reaccionar a tus impulsos
El camino de evolución cultivando las virtudes:
-Detente!, dáte un respiro y experimenta tus sentimientos con más profundidad. Busca tu coherencia interior
Tu deseo de divertirte te impide encontrar la satisfacción que buscas. Cultiva la presencia en todas tus experiencias y procura llevar quietud interior a tus actos
-Anclate en tu cuerpo, enraízate, respira y atrévete a experimentar la gama entera de emociones, tanto las positivas como las negativas y no te reprendas o te sientas abandonad@ cuando no te sientas positiv@ ni demasiado entusiasmad@ por algo
-Valora tu entusiasmo, calidez, servicio, amabilidad y generosidad
-Confía en tu agilidad mental, tu espíritu de cooperación, tu capacidad de organización y tu capacidad de relacionarte con la gente para materializar aquello que deseas
-Tienes una forma de pensar estratégica y eres capaz de organizarte para rápidamente utilizar con eficacia tus recursos internos y externos
-Eres creativ@, multifacétic@, alegre y gozas aportando lo que consideras desarrollando de esta forma, tus distintas habilidades e intereses
-Si acallas tu mente y aprendes a tolerar tu ansiedad, conectas con tu voz interior y la guía de tu espíritu
– Centra la atención e tu respiración hasta que alcances la calma física y mental y lleva la atención al cultivo de la paciencia y la perseverancia
-Tienes la capacidad de mantener la actitud positiva y el sentido de la abundancia. Si observas y encaras los sentimientos, puedes superar cualquier dificultad
-Confía en la presencia de tu espíritu y en las leyes naturales que rigen el cosmos y tu vida y deja atrás la vieja creencia de no sentirte apoyad@ o de estar perdid@ o desorientad@. Encuentra tu propio lugar, fluye y desarrolla tu potencial
-Observa tu tendencia a proyectar y planificar sin ser consciente de que toda manifestación, desde las dimensiones más espirituales hasta el mundo físico, es la obra del Ser. Así, toda creación, es el fluir del Ser y la realidad del Ser es la presencia
-Eres profund@, eficaz, estable y creativ@ cuando estas conectad@ con la realidad. En esas ocasiones, tu alegría es visible e influye en todos porque es auténtic@